viernes, 13 de julio de 2012

Afrontar el miedo

Ocultar nuestros sentimientos, nuestros temores… es sinónimo de acrecentar la angustia interior. Para normalizar una situación hay que expresarlo sin tapujos y no intentar esconderlo, si no es así, cualquier referencia que pueda salir a posteriori  repercutirá negativamente sobre el estado anímico.

Recuerdo, que en alguna ocasión, me habían hecho comentarios a que realizase las pruebas para determinar si yo podría padecer  la enfermedad o no, cualquier referencia me erizaba el bello y me ponía a la defensiva.

Aunque iba mejorando, no había asumido completamente lo que sucedía. Tengo un amigo que padece una enfermedad y es consciente de que la sufrirá toda su vida pero no tiene ningún problema en hablar libremente sobre el tema, ha normalizado su situación convive con ello y acepta lo que le sucede. Gracias a esta actitud toma la medicación adecuada y se cuida enormemente. Suya es la frase que en ocasiones utilizo: “Estar mal solo sirve para valorar lo bien que estas, cuando estas bien”


Ocultar, esquivar, no afrontar la situación es balsámico en un momento determinado pero no soluciona el problema. Quizás nuestro entorno no nos comprende o es difícil comentarlo, entonces busquemos la ayuda de un terapeuta.

Expresarse no es solo hablar, también podemos escribir, descargar nuestros pensamientos es lo que cuenta. El hecho de no afrontar las circunstancias ni hablar de ellas, hace que nuestros miedos no se superen y por ende el malestar vaya en aumento.

En una ocasión estaba solo en casa viendo un programa que realmente me estremecía y me asustaba, estuve tentado de cambiar de cadena pero en un instante determinado reflexioné y pensé, “Un momento, me estoy asustando por algo que es ficticio y que no esta sucediendo, esto no tiene sentido”, así es que decidí seguir con la visión de dicho canal y pude ver el programa sin problemas y cuando me acosté dormí profundamente sin ser acechado por ninguna pesadilla. Esto es una descripción gráfica de lo que sucede en muchas ocasiones con el miedo, no afrontamos lo que sucede y el miedo, que en la mayoría de veces no esta justificado, se apodera de nosotros y nos domina, entonces se debe tomar conciencia de lo que sucede, reconocer la situación y a partir de ahí afrontarlo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Recomienda este blog!